lunes, 18 de agosto de 2014

Te sigo esperando...y no me voy a cansar, hasta que llegues.

Cuando algo nos falta debemos llenar ese vacío. Aunque cuando es amor lo que nos falta, no hay nada que lo llene de verdad.


Aquel motor, el que hace que todo avance hacia delante, el que te hace ver la estupidez, la maldad y tantas otras cosas y muchas más pero en su justa medida. Ese motor que te da fuerza. Que te da motivo para volver a casa, para buscar otro gran éxito, para trabajar, cansarte, esforzarte, para alcanzar la meta final. Fácil. Mágico. Perfecto. Ese motor Amor.



Y cuando menos te lo esperas; cuando crees que todo va en el sentido equivocado. Que tu vida, programada en cada mínimo detalle está naufragando...de repente, sucede.




Como se sabe si esa persona es tu amor verdadero...solo hay que cerrar los ojos y escuchar al corazon.