No quiero seguir en este maldito infierno. Quiero vivir. Sentirme viva. Aprovechar cada día y vivirlo hasta quedar rendida. Cuanto más adelgaze mejor me sentiré y con esa felicidad podré alcanzar el propósito. Podre ser libre. A partir de mañana, seré otra, esa que siempre soñé. Una mujer...Perfecta.
La vida comienza a cambiar cuando uno mismo cambia la forma de verse a si mismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario